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Primeros auxilios: Conjuntivitis

La conjuntivitis es una inflamación del blanco del ojo y del interior de los párpados. Puede estar causada por alergias, sustancias irritantes, infecciones víricas o bacterianas. 

Algunos tipos de conjuntivitis desaparecen por sí solos, pero hay otros que requieren tratamiento con antibióticos. Cuando la conjuntivitis está causada por una infección, se puede contagiar fácilmente entre las personas. 

Signos y síntomas

  • molestias oculares o notar que se tiene algo dentro del ojo 
  • enrojecimiento ocular y del interior del párpado 
  • líquido acuoso o similar al pus que sale del ojo 
  • pestañas apelmazadas o pegadas entre sí al despertarse por la mañana 
  • escozor, picazón y lagrimeo (frecuente en las reacciones alérgicas)

¿Qué hacer?

  • Llame al médico de su hijo, sobre todo si se trata de un bebé. Si parece ser una infección bacteriana, su tratamiento puede incluir gotas antibióticas o una pomada antibiótica. 
  • Limpie el ojo delicadamente con agua tibia y una gasa o bolas de algodón. 
  • Aplique compresas frías con delicadeza sobre el ojo afectado. 
  • Si se lo indicara el médico, dé paracetamol o ibuprofeno a su hijo para aliviarle las molestias (revise las instrucciones sobre la dosis para darle una cantidad adecuada). No dé ibuprofeno a un bebé menor de 6 meses. 

Haga que su hijo reciba cuidados médicos si:

  • no muestra mejoría alguna 2 o 3 días después de iniciar su tratamiento, o al cabo de una semana si no se trata 
  • su enrojecimiento ocular está peor
  • la inflamación de sus párpados va en aumento 
  • se queja de un fuerte dolor ocular
  • tiene cualquier cambio en la visión
  • también le duele el oído (la conjuntivitis y las infecciones de oído pueden ocurrir al mismo tiempo)

¡Anticipar es la mejor prevención! 

Indíquele a su hijo que se lave las manos a fondo y con frecuencia, sobre todo antes de tocarse los ojos. No permita que su hijo comparta pomadas, paños, tollas ni fundas de almohada. Hable con el médico si el picor, el lagrimeo o la rojez ocular son frecuentes en su hijo; una alergia podría estar causando estos síntomas. 

Si algunas cosas del medio doméstico parecen estar irritando los ojos de su hijo, pruebe a:

  • quitar el polvo y pasar la aspiradora con más frecuencia
  • cerrar puertas y ventanas cuando haya mucho polen en el exterior 
  • reducir al máximo las sustancias químicas perfumadas y/o irritantes, como los limpiadores domésticos. 
  • evitar que su hijo sea fumador pasivo (que se exponga al humo del tabaco fumado por otras personas)